Que levanten la mano quienes no se sientan Jodidxs
- autogobiernocultural
- 17 ago 2023
- 2 Min. de lectura
La obra Jodidxs, de Pornotráfico, transmite y hace vibrar el sentimiento de desolación que habitamos por haber nacido en un mundo que colapsa y colapsa y cuya caída nunca deja de verse abismal.
La obra cuenta una historia, pero una que no tiene linealidad, donde el personaje de Calamardo encarna como metáfora el desasosiego de una realidad en la que cualquier convicción termina en desesperanza. Este personaje de caricatura icónica se multiplica, se transforma en voces de muchos y de uno, al mismo tiempo testimonio personal del dramaturgo y coralidad de toda una generación —o varias— que atestiguamos la destrucción constante de nuestro mundo, observada en la proliferación de pantallas llenas de malas noticias.

Por momentos vemos llamadas amorosas que al repetirse con variaciones parecen ser trasuntos múltiples de una misma realidad compartida. Calamardo en algún punto es el mal artista que en su depresión sistémica sólo consigue representar la distimia en un teatro dentro del teatro del no-teatro. La dramaturgia se burla de nuestras narrativas pero al mismo tiempo las abraza para encontrar en el sinsentido un sentido de colectividad.
Respecto a los lenguajes escénicos, la obra se luce con transformaciones espaciales de un dispositivo hecho de telas remachadas, como si el vestuario se convirtiera en carpa, y la escenografía en carne, desdibujando las barreras. Lxs interpretxs aparecen orquestados en dos grupos: un cuarteto de seres sin cejas que habitan una tela de retazos común, y un personaje solo, con cejas y con una vestimenta casual, que lo identifica como el personaje principal (múltiple) de esta historia.
De esta suerte, el trabajo actoral destaca por su ensamble y su capacidad de contrapunto sonoro y visual, en texturas que van desde el solo hasta la coralidad más diversa para sostener una pieza teatral que no escatima en largas tiradas ni momentos de gran opulencia textual.
Se agradece SIEMPRE un abordaje diverso del lenguaje escénico, tanto en sus formas como en su contenido. Las marcas generacionales son presentes pero la propuesta se sitúa claramente desde su punto de vista, permitiendo sumergirnos en los flujos emocionales del desasosiego, la ansiedad, la tristeza, la desilusión y las pocas vías de escape de un futuro catastrófico que nos avalancha.
Como un atisbo de posible salida, la obra nos propone compartir la incertidumbre, compartir el dolor, y quizás en el identificarnos juntxs pueda pulirse una cristalina alegría. Pero esta apreciación nada arruina el vértigo, pues como todo lenguaje abierto, y construido desde la complejidad, se vuelve solo una lectura de las miles posibles en cada espectadore.
Recomiendo mucho para ir con tus amigxs a verla y transformar juntxs la tristeza.
JODIDXS
Una obra de Pornotráfico
Elenco: Erik Gutierrez Otto, Daniela Luque, Lilie Khavetz, Santiago Villalpando y Daniel Berthier
Dramaturgia y dirección: Anacarsis Ramos
Luz: Mau Arizona
Vestuario: Airam Castillo Fernández
Espacio: Anacarsis Ramos y Airam Castillo Fernández
Música original y diseño sonoro: Isay Ramírez
Diseño de dispositivo multimedia: Karla Sánchez Kiwi
Coreografía: Ricardo Daniel
Asistencia de dirección y producción: Thalía Palacios
Asistencia de producción: Moy Romero
Maquillaje de Calamardo: INSEKTO (@insekto)
Diseño de poster y tipografía: Santiago Villalpando
Producción: Erik Gutiérrez Otto y Anacarsis Ramos
Apoyo de producción: Santiago Villalpando
Realización de vestuario y funda de la casa: Ray Sanchez y Rafael Villegas
Planos de la casa: Humberto Cuapio
Curaduría de memes: Santi Villalpando y Karla Sánchez Kiwi
Ilustración: Nicolasa Ortíz Monasterio
Comentarios